Diferencias entre un atomizador, claromizador y cartomizador

De forma básica, puede decirse que el cigarrillo electrónico posee cuatro componentes esenciales. La boquilla para inhalar, la batería como fuente de energía, el cartucho o recarga con el e-liquid y el atomizador que actúa en el proceso de la vaporización.

Pero si profundizamos en el funcionamiento del vaper, a veces nos encontramos con otras partes, también importantes, tales como el claromizador y el cartomizador posee cuatro componentes esenciales. La boquilla para inhalar, la batería como fuente de energía, el cartucho o recarga con el e-liquid y el atomizador Pero ¿qué relación tienen con el atomizador? ¿En qué se diferencia el atomizador, claromizador y cartomizador?

¿Cómo funciona el cigarrillo electrónico?

Como sabes, el cigarrillo electrónico es una alternativa al cigarrillo tradicional, pero sin producir la combustión del tabaco. Trabaja con un líquido de vapeo, compuesto por propilenglicol, glicerol vegetal, aromas y, si se desea, nicotina. Si quieres saber más sobre los pros y contras del vapeo no te pierdas este artículo.

Cuando se inhala a través de la boquilla, ese e-líquido es conducido hacia el atomizador , para ser calentado y convertido en vapor. Así que, la persona que vapee no inhala humo, inhala vapor aromatizado.

Entonces, cuándo actúa el claromizador y el cartomizador, y ¿la diferencia con el atomizador? Esta diferencia radica en el funcionamientode cada uno de estos elementos. Así que es importante definirlos.

¿Qué es el atomizador de un vapeador?

El atomizador es el elemento más importante del e-cigarrillo, es allí donde se genera el vapor. Se encuentra entre la batería y la boquilla, y es el que almacena el líquido y posee la resistencia y el algodón.

Cuando el vaper posee un sistema abierto , al atomizador se le debe recargar el líquido. A su vez, este líquido impregna al algodón, para después ser calentado por la resistencia y producir vapor. Vapor que es inhalado por el vapeador.

Si el vaper cuenta con un sistema cerrado, es más sencillo y práctico. En este caso, al dispositivo que contiene la batería, simplemente, se le inserta una cápsula sellada, o pod, que contiene el líquido y todos los componentes necesarios para producir el vapor. Es decir que, esa cápsula o cartucho funciona como los atomizadores tradicionales.

Este sistema cerrado es más ventajoso , sobre todo para los no expertos, porque no hay necesidad de recargar el tanque del atomizador, ni de cambiar el algodón o resistencias. Solo hay que adquirir el pod con el líquido del sabor deseado y acoplarlo en el dispositivo.

Tipos de atomizadores

Existen diversos tipos de atomizadores. Entre esta clasificación encontramos:

• Los atomizadores reparables. A los que, el mismo vapeador, puede cambiar la resistencia. Pueden ser:
  • RDA (rebuildable drip atomizer). Estos atomizadores no poseen tanque. Así que el algodón debemos impregnarlo de líquido continuamente
  • RTA (rebuildable tank atomizer). Son los que poseen el tanque para que lo recarguemos con el líquido.
  • RDTA Son atomizadores híbridos, una combinación entre RDA y RTA.
  • GTA Son menos populares. Se caracterizan por poseer la resistencia dentro del tanque.
• Claromizadores. Son los atomizadores a los que no se les cambia la resistencia. Pero ahondemos más sobre su funcionamiento, para poder diferenciarlo del cartomizador.

¿Qué es el claromizador?

Como has visto, el claromizador no es más que un tipo de atomizador, pero es la versión comercial, puesto que la resistencia y el algodón están incorporados de fábrica.

Así que, el claromizador es un sistema no reparable, ni necesita mantenimiento. Cuando se haya cumplido su vida útil, solo debes extraerlo del vaper y sustituirlo por otro claromizador.

El claromizador es, dentro del sistema abierto de vaper, un atomizador muy sencillo. Porque al no repararse, solo se usa, se desgasta y se tira para colocar otro.

¿Y el cartomizador? Qué diferencia tiene.

¿Qué es el cartomizador?

El cartomizador es un dispositivo compacto, también para convertir el e-liquid en vapor, pero combina en un solo elemento el atomizador y el tanque. Es un dispositivo que se acopla a la batería mediante tornillos.

También existen diversos tipos de cartomizadores. Algunos de ellos incorporan una especie de esponja, denominada polyfill, mientras que otros tienen tanques que pueden ser recargados.

A diferencia del claromizador, el cartomizador puede utilizarse aproximadamente 20 veces. Por supuesto, todo dependerá de la calidad de materiales y la fabricación.

Diferencias entre el claromizador, atomizador y cartomizador

Después de conocer sus definiciones y relaciones entre uno y otro, es más fácil reconocer las diferencias entre el cartomizador, el atomizador y el claromizador.

Básicamente, estos tres elementos poseen el mismo objetivo: contienen el líquido para convertirlo en vapor. Pero se diferencian, principalmente, en el sistema o funcionamiento que tienen para producir ese vapor. Entre las diferencias se encuentran:

Estructura

El claromizador solo es un tipo de atomizador, pero fabricado para mayor practicidad, ya que no se le repara la resistencia, se usa y se tira. Mientras que el cartomizador integra el atomizador y el tanque en un mismo elemento, de manera compacta.

Capacidad para el líquido de vapeo

Normalmente, los claromizadores cuentan con una capacidad mayor, a veces hasta el doble, de la que ofrecen los cartomizadores.

Diseño y material externo

Los claromizadores están fabricados de un material transparente, por lo que facilitan al vapeador conocer la cantidad de recarga que poseen. Por su lado, el cartomizador se elabora con materiales que no ofrecen tal visibilidad.

Materiales internos

El cartomizador utiliza internamente el polyfill para contener el líquido, aunque también existen algunos con tanques. En este caso, el polyfill cuenta con la ventaja de evitar derrames.

Por otra parte, el claromizador emplea una mecha de algodón que conecta el líquido (en tanque) con la resistencia.

Ya conoces la diferencia entre atomizador, claromizador y cartomizador. Pero, realmente, la mayor practicidad la poseen los cigarrillos electrónicos de sistema cerrado, en el que acoplas el cartucho a la batería sin preocuparte por reparar resistencias o recargar líquidos.

Los cigarrillos con sistema cerrado puedes llevarlos a donde quieras, porque los cartuchos se encuentran sellados y no presentan fugas.

El sistema cerrado es tan versátil y cómodo que, incluso, puedes cambiar la cápsula por otra de sabor diferente, sin haberse terminado la recarga. Y podrás reinsertarla en el momento que desees.

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